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Prey - impresiones QuakeCon

Por fin hemos podido ver más sobre la reinterpretación de Prey concebida por Arkane, y volvemos de Texas impresionados.

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Nadie lo duda: Prey es un nombre muy chulo para un videojuego. Está tan guay que Bethesda decidió mantener con vida la franquicia (que era originalmente de 2K) incluso después del éxito templado de la primera entrega y luego el problemático desarrollo de un Prey 2 que terminó cancelado ya en sus manos. Pero no estamos aquí para llorar por los que nos han dejado, sino para mirar al futuro y contemplar lo que puede pasar cuando Arkane termine de ponerle su ya reconocido y reconocible sello a una propiedad de ciencia ficción que se estrenó hace años en Xbox 360 y PC, pero ahora con una forma bien distinta.

Al principio era una mezcla entre puzles y tiroteos contra aliens, y a partir de ahí nadie sabe lo que nos habría llegado si Human Head hubiera terminado lo que parecía una segunda parte radicalmente diferente al original. Pero no pudieron hacerlo, y cuando los expertos en experiencias de inmersión en primera persona se pusieron manos a la obra, ya quedaba claro que el resultado final sería aún más distinto. Tras haber visto el nuevo tráiler y una presentación exclusiva en la QuakeCon de Texas (y todo esto después de aquel impactante retorno en el E3 de hace mes y medio), tenemos unos cuantos detalles calentitos para compartir y un primer vistazo tentador sobre lo que podría convertirse en un nuevo clásico de la ciencia ficción en los videojuegos.

El nuevo Prey está ambientado en una estación espacial. No es mundo abierto del todo, pero sí mucho más abierto que Dishonored, el último (y próximo) trabajo del estudio. Tiene una pinta impactante, y ya lleva ese toque tan característico de Arkane: un poco de opulencia y exceso en el diseño del entorno, en este caso concreto con ribetes dorados en las escaleras y otros guiños sutiles que recuerdan a la exploración entre riqueza y poder que vivimos anteriormente en Dunwall.

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Pero esto no es Dunwall, para nada. El estilo steam (diesel) punk y la mitología victoriana quedan atrás en favor de la negrura del espacio y un enemigo alienígena más misterioso que todo lo que hayamos visto del estudio hasta ahora. El diseño de este nuevo adversario es tan único que resulta complicado compararlo o definirlo. Podríamos hablar de Soma por su composición fantasmagórica, pero poco más; Arkane está haciendo un buen trabajo a la hora de crear algo que se sienta distinto en el espacio de la ciencia ficción, y eso es ya todo un logro.

Los adversarios tienen algo espeluznante, de otro mundo. Durante la demostración, en una parte ya avanzada, pudimos ver tipos de enemigos más desarrollados. Había por ejemplo una criatura denominada Phantom que, aparentemente, es capaz de cambiar de forma, lo que significaría un problema considerable para los jugadores, sobre todo si tienes en cuenta que aquí habrá pocas armas. Como explicaban desde Arkane, habrá varias formas de resolver los problemas, y las armas son sólo una de ellas.

Una de las soluciones potenciales a múltiples entuertos es la gloo gun (algo así como la pistola viscosa). Medio arma, medio herramienta, la puedes usar para congelar a tus oponentes y dejarlos quietecitos en el lugar antes de despacharlos con algo mucho más letal. Alternativamente, puedes encontrar otros usos para este ítem. Un ejemplo directo de la demo fue cuando el jugador usó la espuma pegajosa para sellar el escape llameante de una tubería de gas. O también sirve para generar un saliente improvisado que permite escalar hasta zonas previamente inaccesibles.

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Pero estamos hablando de Arkane, así que por descontado esperamos muchos más trucos para seguir adelante. El más ilusionante por ahora se llama Mimic, una habilidad que el jugador aprende de los propios aliens (todavía no sabemos cómo) y que permite asumir la forma de un objeto en el mundo. Durante la demo vimos otro par de ejemplos. En el primero, el jugador adopta la forma de una taza para entrar en una habitación a través de una pequeña escotilla. En el segundo, el jugador se transforma en una carga de reciclaje (una especie de granada que se puede lanzar para limpiar los deshechos de una sala, haciéndolos desaparecer) y luego usa una segunda habilidad, una carga kinética, para proyectarse hacia otra zona del nivel. Estos dos últimos párrafos sí que recuerdan a Dishonored, ¿verdad? Eso nunca es malo si se marcan las diferencias.

Hay naturalmente otras habilidades que aún no hemos visto, así como mejoras en un árbol que se llama Neuromods, un dispositivo que te implantas en el ojo. Es evidente que estas acciones son muy útiles, pero también nos cuentan que podrían atraer atenciones indeseables.

Todavía es complicado calcular cuán ambiciosos (o incluso obsesivos) se pueden poner en Arkane con sus sistemas de gameplay y con las posibilidades de aumento y actualización (por ejemplo, en Dishonored 2 hay una especie de sistema de artesanía o 'crafteo', ¿llegarán hasta eso aquí?), por lo que toca esperar para ver lo que planean tanto con las habilidades mejorables como con las aprendidas de los aliens.

Otro aspecto desconocido es cómo de integrales resultarán las secciones de gravedad cero. El interior de la estación espacial será más abierto que las misiones lineales de Dishonored, y nos da la impresión de que todo esto podría tomar la forma de algo similar a una experiencia metroidvania. Parece que también podrás acceder a la estación desde fuera, aunque no nos queda claro con qué grado de libertad o cómo se aprovechará esto durante la campaña.

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Lo que ya sabemos seguro es que habrá más gente en la estación. Supervivientes que encontrarse y con los que interactuar. Tendrán sus propias historias que contar, y quizá también un puñado de recados. Esperamos una buena combinación de misiones de la historia y secundarias, pero no tenemos más detalles al respecto. Por motivos obvios Arkane mantiene sus cartas bien pegadas al pecho, pero como a Prey le queda hasta bien entrado el año que viene 2017, queda tiempo de sobra para que el estudio vaya avanzando más detalles.

Y si bien nuestra atención más inmediata se centra a partir de ya en Dishonored 2, pues la 'secuela' del clásico steampunk llega este mismo otoño, nos quedamos con ganas de ver, saber y sobre todo jugar mucho más de Prey. Ya tiene una pinta genial, con la personalidad y el tipo de detalles que esperamos del estudio, y además presenta un enorme potencial si son capaces de equilibrar bien la dinámica entre el entorno abierto y la ambientación marcada por la ciencia ficción. Aunque queda por hacer, lo que hemos visto en la QuakeCon nos ha dejado realmente intrigados. Arkane podría estar cocinando otro gran 'simulador de inmersión' en primera persona, como lo llaman ellos.

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ANÁLISIS. Autor: Mike Holmes

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