Nioh - impresiones

Nioh es el nuevo juego de Koei Tecmo y por fin su proceso de desarrollo está a punto de terminar, aunque ha sido un arduo y largo camino. Inicialmente, Nioh se había anunciado en 2004 para PlayStation 3 e iba a basarse en un principio en la película japonesa. No obstante, se dejó de lado ese concepto y el juego no llegó a la fecha original de lanzamiento para 2006. Tras esto, no volvimos a saber de él hasta 2009 cuando Koei Tecmo confirmó que se encontraba todavía en desarrollo, pero ahora en las manos de Team Ninja (Dead or Alive, Ninja Gaiden).

Siete años más tarde los jugadores por fin han tenido la oportunidad de probar Nioh de primera mano gracias a una versión demo/beta que ha estado disponible entre el 26 de abril y el 5 de mayo. Por supuesto, no podíamos dejar pasar esta ocasión y hemos pasado unas cuantas horas con la demo. A continuación os dejamos nuestras impresiones de este juego samurái claramente inspirado en Dark Souls.

Cuando decimos que Nioh se ha inspirado en Dark Souls, lo que realmente queremos decir es que se trata de un clon a todas luces. Nioh es un juego de acción en tercera persona que penaliza al jugador cada vez que lo matan y lo manda al último altar que haya visitado. En Dark Souls, en lugar de altares eran hogueras. Cuando los jugadores mueren, o rezan ante un altar, todos los enemigos resucitan, se restaura la salud del jugador y se renuevan los objetos que te darán más salud. Y sí, igual que sucede en Dark Souls, si mueres caen los puntos que te sirven para subir de nivel. Después odias tener que volver a conseguirlos antes de volver a morir, o volverás a perderlos.

La dinámica de juego se parece mucho más a Dark Souls que a Ninja Gaiden o Bayonetta. Es un estilo más lento que se desarrolla entre llamativos combos y espectaculares 'finishers'. El combate en Nioh se centra más en leer a tu oponente y reaccionar en consecuencia. Aunque Nioh tenga un estilo similar al de Dark Souls, también cuenta con ciertas peculiaridades. La más evidente tiene que ver con las posiciones que pueden adoptar los personajes durante el combate. Con el arma levantada hacia arriba harás más daño, pero los golpes serán más lentos y tu bloqueo no resultará muy efectivo. Sin embargo, si mantienes el arma un poco más abajo podrás atacar a mayor velocidad y podrás evitar ataques enemigos fácilmente (evitar, no bloquear), pero tanto tus ataques como bloqueos estarán en su punto más débil. Una posición neutral intermedia te permitirá conseguir un equilibrio entre la velocidad y el daño y, aunque no sea la mejor posición para evitar los ataques, sí que resulta ser la mejor para bloquearlos.

En la demo hemos tenido acceso a tres tipos de armas: un hacha gigante, una espada y una lanza. Las posiciones funcionan de la misma forma para todas las armas, pero el gameplay cambia drásticamente en función del arma que elijas. La espada tiene el mejor equilibrio y debería ser el arma que elija un jugador principiante. Por otra lado, la lanza tiene un gran alcance y puede llegar a múltiples enemigos a la vez, mientras que el hacha es lenta pero muy potente. El jugador es quien tiene que descubrir qué arma se adapta mejor a él y adoptar las posiciones en función del enemigo. Además, puedes encontrarte también varios objetos y armas secundarias, entre las que se incluye un arco con flechas. Este es ideal para atacar de lejos o para derrotar enemigos uno a uno (también puedes tirar piedras). Para la parte de la armadura también puedes encontrarte y probar distintos objetos.

Otro aspecto que vuelve a resultar similar a Dark Souls es que también puedes encontrarte con charcos de sangre cada vez que mueren los jugadores, pero Nioh lo aborda de forma diferente: en lugar de enseñarte cómo mueren los jugadores (te lo dice), estos pueden tener que enfrentarse al personaje de otro en una lucha a muerte. El personaje de los otros jugadores estará controlado por la IA (y es bastante más difícil de vencer que los enemigos normales) pero tendrá todas las habilidades, armas y armaduras que el jugador tenía en el momento de su muerte.

Otra gran diferencia entre ambos juegos es la temática. Dark Souls tiene una mezcla de fantasía oscura y medieval, mientras que Nioh se inspira en el Japón feudal y en la mitología japonesa. Nos ha gustado este estilo y nos ha recordado lo mucho que echamos de menos a Onimusha (aunque Nioh se parece mucho más a Dark Souls que al juego de Capcom).

No jugamos lo suficiente como para explorar el máximo potencial de Nioh, pero nos pica la curiosidad. A nivel gráfico, Nioh tiene una buena calidad a pesar de que se trata de una versión en desarrollo y parece que funciona con una firme tasa de imágenes. Además, también incluye una opción que permite elegir entre mejores gráficos o mejor framerate. Para concluir, podemos decir que, por ahora, no hemos visto nada que nos haga creer que Nioh pueda llegar a ser mejor que Dark Souls, pero nos ha gustado la forma en que reinterpreta algunas de las ideas de los juegos de From Software.